... gracias por dejarme reposar en ti, dejar desfogar mi dolor, mi furia contenida, mi angustia
Eres suave y solo atinas a escuchar, a dejar que mis lágrimas se difuminen en tu tez.
En ocasiones te dejo de lado y aun así no duermo si no estás. Conoces mis sueños, mis plegarias.
Sueles no dar consejo, simplemente escuchas, siempre estás allí. Siempre atento y predispuesto.
No puedo hacer mucho por ti solo cambiarte las fundas a diario.
Gracias almohada!
1 comentario:
La tan fiel almohada!
La mia está delgadita como galletita pero jamás la cambiaré!
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